En pleno siglo XXI ser mujer dentro de muchas sociedades, incluyendo la mexicana, lamentablemente significa remar contra corriente en el plano escolar, laboral y profesional, por mencionar algunos, lo que se traduce en ver sueños truncados que buscan una realización personal.
Sin embargo existen personas y grupos de la sociedad que están conscientes de esta problemática y quieren hacer algo al respecto para revertirla. Un ejemplo de ello es #Laboratoria, una iniciativa que busca, selecciona y prepara a mujeres en el ramo de tecnología para darles las herramientas necesarias que les permitan tener un mejor nivel de vida.
¿Cómo nace este proyecto?
Recientemente tuvimos la oportunidad de platicar con Ana María Martínez, quien se desempeña como partner y COO de #Laboratoria. Ella nos comenta que todo comenzó en Lima, Perú, como una agencia de desarrollo web y al cabo de un año lograron reunir a un grupo de desarrolladores, todos hombres, porque en este sector menos del 10% son mujeres.
De acuerdo con Martínez, esto ha sido como consecuencia de estereotipos que se fueron creando desde la publicidad de Apple, Compaq y juegos para niños, lo que provocó que las mujeres se dedicarán a este rubro.
Con este panorama, la agencia decidió crear una academia, muy pequeña al inicio, para llenar ese vacío de personal femenino. Fue tal el impacto que tuvo, que varias personas y empresas amigas se interesaron e ello.
Con esta respuesta, Ana María y su equipo vieron que existía una oportunidad de atender este mercado y enfocaron sus energías de lleno en este proyecto, el cual llegó a México y Chile. Era el año 2015.
¿Para quién es #Laboratoria?
Ana María lo dice claramente: “es para una joven que tenga ganas de ir por más en su vida”. Pero no pienses que por el hecho de usar la palabra “joven”, el resto está fuera, para nada. Es para cualquier mujer, lo que sucede es que hay mayor cantidad de jovencitas entre las participantes, actualmente la edad promedio en #Laboratoria es de 26 años.
La ejecutiva comenta que quienes llegan aquí son personas para quienes el entorno les queda pequeño, ya sea la universidad o el instituto al cual pudieron acceder lamentablemente no es de tan buena calidad o el trabajo que encontraron tampoco es de adecuado y terminan laborando en lugares de comida rápida, call centers o en el comercio informal.
Un parteaguas
Este espacio es el inicio para un cambio radical en la vida de las participantes, pero para ser elegidas, todas deben pasar por un proceso que mide su interés y potencial para la tecnología: se llevan a cabo exámenes que no requieren de un nivel escolar mayor a secundaria y también un taller donde se les pide que hagan tareas de programación básica, etcétera.
Pero eso no es todo, hay una serie de actividades a realizar que funcionan como filtros y obviamente no todas las concluyen y después de esto se elige a una de cada tres. Pero debe ser de esa forma porque se busca a las mejores y también porque su preparación -que dura seis meses- será exigente, tendrán que acostumbrarse a aprender conocimientos muy rápido, estarán expuestas a un nivel de presión elevado hasta el final. Al día de hoy se han postulado alrededor de 10,000 mujeres y las egresadas suman 800.
Y así como es de rigurosa la formación, también está la promesa que deben cumplir de encontrar un trabajo en las mejores empresas; los resultados hablan por sí solos: las egresadas cuadruplican en promedio sus ingresos, en números, se traduce aproximadamente en 800 dólares como sueldo base o inicial, cifra que con el tiempo crece notablemente hasta llegar en algunos casos a 2,000 dólares
Abriendo puertas
¿Cómo ha sido la respuesta de las empresas que tienen en sus filas a quienes pasaron por #Laboratoria? Cada vez son más, aunque no fue algo inmediato, pero al ver el desempeño de las egresadas ahora hay más de 200 compañías empleadoras que incluyen nombres como Accenture, Wal-Mart Technologies, Everis, BBVA, Scotiabank, Citibanamex, y las hay de todo tipo, pues como dice Ana, cualquiera de ellas necesita una presencia digital que requiere de innovación constante.
Además, cada mujer contratada se convierte en embajadora de #Laboratoria que le abre las puertas a las demás.
